domingo, 16 de diciembre de 2007

"Pitío", pütiw en mapudungun

Colaptes pitiusEl pitío es el carpintero más común en Chile y, por lo tanto, el más fácil de observar. Ayuda mucho a ello su típico grito, al cual debe su nombre popular ( pi-tío, pi-tío, pi-tío) que se escucha fuerte en los bosques nativos. En la fotografía se aprecia un pitío posado en un enorme y añoso lingue (árbol nativo).

Este mes ha sido excelente para observar estas aves. Hace dos fines de semana atrás tomé muchas fotos parecidas a éstas dos en el campo de mis amigos Maussy y Miguel. Allí es posible escuchar y ver a los pitíos, dado que ellos han resuelto preservar con especial cariño y celo sus montes con añosos hualles, raulíes, lingues, laureles, conjuntos de especies que constituyen el hábitat natural de estas hermosas aves. Hoy, en los alrededores de Temuco, a menos de 10 minutos del centro de la ciudad, en el sector Fundo el Carmen, me encontré con este hermoso pitío, posado en una rama de notro, a menos de diez metros. Baje la ventanilla del auto y desde ahí mismo, sin bajarme para evitar que volara, le tomé alrededor de quince fotos, una de las cuales subo al blog.

lunes, 10 de diciembre de 2007

"Diucón" o " Hurco" Wüdku en mapudungun

Xolmis pyropeEste es un diucón o hurco, como se le conoce en la zona sur, particularmente en Temuco.
Es un ave muy elegante, que se caracteriza por su "barbita" blanca y por su iris de un color rojo intenso. Generalmente solitario. Se alimenta de insectos. En el invierno se acerca a las ciudades. Es muy común verlo chocar con las ventanas de las casas, dado que percibe su reflejo.
Esta foto fue tomada temprano en la mañana, en la calle Gabriela Mistral en Temuco, al borde de un canal.

domingo, 9 de diciembre de 2007

"chercán", chedkeñ o chüdüf en mapudungun

Troglodytes aedonHe aquí la fotografía de un diminuto chercán tomada en el campo de mis amigos Maussy y Miguel, cerca de Temuco. Es un ave pequeña, de color café, muy escurridiza que se mueve y caza entre los matorrales, en las zarzamoras, etc. Es bastante bulliciosa y emite, entre otros, su característico tchrrrr, tchrrrr. Se desplaza nerviosamente a saltos, con la cola erguida.
Común en matorrales y parques de la ciudad.